La familia de las labiadas o lamiáceas, a la que pertenece nuestra planta de hoy, está representada en nuestro término municipal por 36 especies diferentes reunidas en 19 géneros. Se caracteriza porque las flores presentan sus pétalos a modo de labios, generalmente uno superior y el otro inferior. En ella se incluyen muchas de las plantas aromáticas más comunes y conocidas de nuestro entorno.
El romero (Rosmarinus officinalis L.) es un arbusto leñoso, de hojas perennes, aromático, con hojas lineares y revolutas en el margen y que puede llegar a medir más de metro y medio de altura. La flor del romero se caracteriza botánicamente por tener la corola con dos labios desiguales bien diferenciados, el superior con dos lóbulos y el inferior con tres; tiene dos estambres fértiles y el estilo muy recurvado y sobresaliente. Florece prácticamente durante todo el año.
Siendo planta conocida, común y abundante es normal que tradicionalmente haya sido ampliamente utilizada para múltiples y diversos usos y aplicaciones, desde las medicinales a las culinarias e incluso como planta de cualidades mágicas empleada en sahumerios y conjuros.
En primer lugar en importancia, desde un punto de vista local, el romero ha sido utilizado con regularidad y profusión como combustible, tanto como en el hogar como para cargamento de las diversas clases de hornos tradicionales: de pan, tejerías, caleras, etc…
Por otro lado, ha sido desde antaño uno de los más importantes remedios contra toda clase de males. Nos interesan sobre todo aquellas utilizaciones que de él se ha hecho en nuestra localidad:
Partes utilizadas: ramas con flores.
Su preparación puede hacerse en:
- Decocción: 35 gramos de hojas y flores por litro de agua. Hervir durante 15 minutos.
- Tintura: Macerando romero en alcohol de 30-40º durante tres o cuatro semanas.
- Infusión: Una cucharadita por taza. Dejar reposar 5 minutos.
- Aceite: 20 gramos de esencia por cada litro de aceite de oliva.
Usos:
- Con el agua y el alcohol de romero se han dado friegas para combatir las inflamaciones, el reuma y los dolores, tanto musculares como de las articulaciones.
- Es un antibiótico natural, eficaz desinfectante y cicatrizante de las heridas.
- En infusión se ha empleado como depurativo del estómago ya que tiene propiedades carminativas.
- En infusión con miel combate la tos y los catarros persistentes.
- También se ha empleado para evitar la caída del cabello ya que fortalece los capilares y estimula la circulación sanguínea.
Y otras tantas…y tantas…
